Es importante que te mantengas activa durante el embarazo por el bien de tu salud y la de tu bebé. Si realizas una actividad deportiva de forma regular tendrás más energía durante la jornada diaria y un cuerpo más esbelto y fuerte, dispuesto a hacer frente al parto y a recuperar la forma después, en el postparto.
Los beneficios inmediatos que experimentarán las futuras madres son muchos, sobre todo si practican ejercicio tres veces cada semana:
- Ayuda a aliviar las molestias que puedas sufrir en las articulaciones y en la espalda.
- Reduce posibles efectos secundarios que puedas padecer tanto tú como tu bebé durante el embarazo, como la tensión alta y la diabetes gestacional.
- Te ayuda a estar tonificada para el momento del parto.
- Aporta un mejor descanso nocturno y facilita el sueño.
- Mejora el estado de ánimo y reduce el riesgo a padecer depresión durante el proceso de gestación y el postparto.
Durante el embarazo, ¡actívate!
La realidad es que es muy bueno realizar ejercicio durante el embarazo, pero también es muy importante saber escoger cuál es la actividad más adecuada. Por ejemplo, el yoga es uno de los mejores ejercicios para embarazadas. Otras actividades saludables para este periodo son la natación y el pilates, ya que mantienen todo el cuerpo en movimiento manteniéndolo en forma tanto para ti como para tu bebé.
Siempre es conveniente que lo consultes con tu médico de confianza y que te dé el visto bueno antes de comenzar a realizar cualquier deporte. Uno de los ejercicios más simples consiste en sacar media hora al día para ir a caminar más rápido de lo habitual. Es una forma perfecta de comenzar si sueles pasar mucho tiempo sentada.
Las mujeres embarazadas que están acostumbradas a la actividad, deberán elegir un deporte intermedio, que no implique posibles caídas, cansancio en exceso, un sobreesfuerzo o presión excesiva en la espalda o el abdomen.
Las actividades fundamentales para practicar durante el embarazo son:
- Caminar
- Nadar
- Yoga
- Pilates
- Ejercicio cardiovascular de bajo impacto
- Baile (siempre que no implique giros bruscos o movimientos)
- Estiramientos
En todos los casos es prioritario que tengas en cuenta las siguientes recomendaciones, sobre todo a medida que el proceso de gestación vaya avanzando:
- Evita realizar giros o saltos bruscos ya que pueden desestabilizarte e incluso marearte.
- No practiques actividades físicas de alta intensidad ni deportes de contacto.
- Elige practicar ejercicio en lugares frescos y ventilados y evita aquellos lugares con mucha temperatura o poca ventilación.
- Evita realizar deporte que contraiga tu zona abdominal o pasar muchos minutos acostada sobre tu espalda, ya que puede provocarte molestias y dolores.
- Complementa la actividad deportiva con una dieta equilibrada. Elige alimentos buenos para tu bebé y para ti.
- Intenta realizar ejercicio acompañada, por si te encuentras mal o necesitas ayuda en algún momento.
- Si decides realizar alguna actividad como yoga o pilates, es importante que busques centros donde haya especialistas en mujeres embarazadas, con el fin de satisfacer tus necesidades y de poder adaptarse a ti. No practiques estas actividades sin supervisión, a menos que las tengas muy interiorizadas.
Practicar ejercicio con cabeza es el mejor regalo que puedas aportar a tu cuerpo, tanto durante este proceso como una vez acabado. Te encontrarás mejor a nivel físico y emocional, controlarás mejor tu peso y tanto el parto como la recuperación serán más sencillas y rápidas. Si aún no has comenzado, ¡no esperes más! Sal a caminar un rato al aire libre, te sentirás mucho mejor.
Este articulo es una colaboración de:
María José Madarnás, Editora de Maternidad Fácil
