Puedes ser un aficionado a las carreras de montaña, ser maratonista o simplemente correr por diversión. El hecho es que en algún momento nos toca correr en terrenos con desnivel. Al correr cuesta arriba necesitamos esforzarnos más, sin embargo, aunque correr cuesta abajo debería ser una experiencia placentera, debemos cuidarnos debido al fuerte impacto al que podemos llegar a someter a nuestras extremidades en especial nuestras rodillas. Correr cuesta abajo puede llegar a ser muy duro para tu cuerpo. Pero si se corre correctamente, las rodillas y la espalda no tienen porque sufrir, a continuación te dejamos algunos consejos de cómo correr cuesta abajo, sin maltratar tus rodillas.
5 Consejos para correr cuesta abajo sin sufrir una lesión.
5 Consejos para correr cuesta abajo sin sufrir una lesión.
Parte del entrenamiento de un corredor incluye una carrera en cuestas, pues así se gana potencia en las piernas. Esto significa que además de subir, tendrás que bajar. Al correr cuesta abajo, el peso del cuerpo se multiplica por tres. Esto significa que en cada paso una de tus piernas recibe tres veces más el total de kilos que posees. De ahí que sea tan necesario contar con un calzado adecuado que amortigüe la caída, pero también correr en la postura correcta y tener la fuerza adecuada en ligamentos, huesos y músculos.