Seguramente alguna vez te haya pasado que mientras corrías comenzaste a sentir una fuerte puntada en uno de tus costados (debajo de las costillas). Probablemente hayas intentado aguantarte el dolor, pero fue tan molesto que te obligó a parar en tu carrera. La causa aparente de este molesto dolor, mejor conocido como flato o puntada del corredor; seria un espasmo del diafragma por falta de oxígeno el cual ante el movimiento de respirar y correr tironea de los ligamentos que lo unen a los órganos internos, especialmente el hígado (ubicado a la derecha).